El Shar Pei es una raza de perro conocida por su piel arrugada, hocico ancho y características orejas pequeñas, que le dan una apariencia única y entrañable.
1. Origen
El Shar Pei es una antigua raza de perro originaria de China, reconocida por su apariencia distintiva, especialmente sus características arrugas y piel suelta. El nombre «Shar Pei» significa «piel de arena» en chino, haciendo referencia a su pelaje áspero y corto. Aquí te cuento sobre su fascinante historia y evolución:
Orígenes antiguos
Los Shar Pei tienen una historia que se remonta al menos 2,000 años atrás, durante la dinastía Han (aproximadamente 206 a.C. – 220 d.C.). Restos arqueológicos, como figurillas y documentos, han proporcionado evidencia de perros que se asemejan mucho a la raza Shar Pei, lo que sugiere que estos perros ya existían en China hace siglos.
En sus primeros días, el Shar Pei se usaba principalmente como perro de trabajo en las granjas del sur de China. Los campesinos confiaban en ellos como perros guardianes para proteger el ganado y las propiedades, gracias a su lealtad, valentía y habilidades protectoras. Además, eran cazadores eficaces y ayudaban en actividades de caza menor.
Uso como perros de pelea
A lo largo del tiempo, el Shar Pei también fue utilizado en peleas de perros, debido a su agilidad, fuerza y la peculiaridad de su piel suelta y arrugada. Estas arrugas y su piel suelta funcionaban como un mecanismo de defensa: en un combate, si el perro era mordido, la piel podía moverse de manera que le permitiera girar y contraatacar, mientras sus órganos internos quedaban más protegidos.
A pesar de esta asociación, muchos Shar Pei eran conocidos por su naturaleza leal y cariñosa con sus dueños, una característica que los convirtió en compañeros queridos, además de su rol en la protección.
Amenaza de extinción
En el siglo XX, la raza Shar Pei enfrentó una grave amenaza de extinción. En la década de 1940 y 1950, cuando el régimen comunista tomó el poder en China, se implementaron políticas que prohibían y limitaban la tenencia de perros debido a que eran considerados un lujo burgués. Esta situación, combinada con la disminución del uso de perros de trabajo, provocó un declive drástico en la población de la raza.
Durante la década de 1970, se creyó que solo quedaban unos pocos Shar Pei en China continental y Hong Kong. Afortunadamente, un criador llamado Matgo Law, originario de Hong Kong, hizo un llamamiento internacional para salvar a la raza en peligro de extinción. Este esfuerzo recibió atención mundial y, con la ayuda de criadores en Estados Unidos y otros países, la población del Shar Pei se recuperó gradualmente. Este renacimiento de la raza llevó a que fuera reconocida por el American Kennel Club en 1992.
2. Características físicas
El Shar Pei es una raza canina reconocida por su apariencia distintiva y única en el mundo de los perros. Entre sus características físicas más notables se encuentran las siguientes:
- Piel suelta y arrugada: Las arrugas son una de las señas de identidad más destacadas del Shar Pei, especialmente en los cachorros, donde la piel forma pliegues pronunciados por todo el cuerpo. Con la edad, los pliegues suelen reducirse y concentrarse más en la cabeza, cuello y hombros.
- Pelaje corto y áspero: Su nombre significa «piel de arena» en chino, en referencia a su pelaje áspero y corto. El pelaje puede variar en longitud, pero siempre mantiene una textura firme y áspera al tacto.
- Lengua azul-negra: Al igual que el Chow Chow, el Shar Pei posee una lengua de color azul-negra o morada, una característica bastante rara entre los perros y que le da un aspecto distintivo.
- Cabeza y hocico anchos: Tienen una cabeza grande en proporción a su cuerpo, con un hocico ancho y «en forma de hipopótamo» que le otorga una expresión característica y única.
- Ojos oscuros y pequeños: Los ojos del Shar Pei son pequeños, oscuros y almendrados, lo que puede darle una expresión seria o incluso fruncida, especialmente cuando las arrugas alrededor de su rostro son prominentes.
- Orejas pequeñas y triangulares: Sus orejas son pequeñas, de forma triangular y suelen estar dobladas hacia adelante, pegadas al cráneo.
- Cuerpo compacto y robusto: El Shar Pei es de tamaño mediano, con una constitución compacta, fuerte y bien equilibrada. Su cola suele ser alta y se enrosca sobre la espalda o a un lado, lo que añade a su apariencia peculiar.
En conjunto, las características físicas del Shar Pei lo convierten en una raza inmediatamente reconocible y muy apreciada por su aspecto inusual y elegante. Estas particularidades, sumadas a su historia, han contribuido a su popularidad a nivel mundial.
3. Personalidad
El Shar Pei tiene una personalidad leal, protectora y reservada. Son perros que suelen ser muy apegados a sus familias y demuestran un fuerte instinto de protección, lo cual los convierte en buenos guardianes. Aunque pueden ser un poco distantes o desconfiados con extraños, suelen ser muy cariñosos y afectuosos con sus dueños.
En casa, tienden a ser tranquilos y poco demandantes, adaptándose bien a la vida en interiores. Sin embargo, su naturaleza independiente hace que a veces sean tercos y requieran un entrenamiento firme y positivo desde cachorros.
4. Cuidados
Los Shar Pei requieren una higiene adecuada debido a su piel arrugada; es importante limpiar sus arrugas regularmente para prevenir infecciones. A pesar de su apariencia tranquila, necesitan ejercicio diario para mantenerse en forma, con paseos y juegos moderados.
Es fundamental proporcionarles una alimentación equilibrada, adecuada para su edad y nivel de actividad, para evitar la obesidad.
Comienza el entrenamiento y socialización desde cachorros usando métodos de refuerzo positivo, lo que ayudará a prevenir comportamientos tímidos o agresivos.
5. Educación y adiestramiento
Es aconsejable iniciar el adiestramiento temprano en el Shar Pei, ya que esto establece una base conductual sólida. La socialización temprana con otros perros y personas es crucial para prevenir comportamientos agresivos o temerosos como para todas las razas.
Además, considero esencial mantener la consistencia en los comandos y tener paciencia durante el proceso de aprendizaje. Incorporar ejercicios de estimulación mental contribuirá a un entorno armonioso.
Por último, es importante monitorizar el comportamiento del perro para abordar a tiempo cualquier problema conductual.